El restaurante, ubicado en una masía con una antigüedad de más de un siglo, dispone de amplio espacio, tanto interior como exterior, para ofrecer a sus clientes todas las comodidades posibles. Cuanto al ambiente interior, conserva el diseño rústico y tradicional, incorporando las facilidades necesarias de la vida moderna que atañen a nuestros tiempos.
Cuenta con cinco comedores, distribuidos por zonas. Los principales se encuentran en el propio edificio y conservan la autenticidad de las primeras generaciones que iniciaron el negocio. Con el paso de los años y el aumento de visitantes, se hizo indispensable ampliarlos y construir dos amplias zonas más en las inmediaciones del edificio principal. Los comedores de la terraza y del “porxet”, más cosmopolitas, siguen siendo fieles y reflejando el carácter tradicional que emana de la masía.
La amplitud del espacio ha favorecido la cabida de grupos grandes, los cuales pueden disfrutar del placer de tener un espacio apartado del resto de comensales y da lugar a la congregación de muchas personas para realizar celebraciones y fiestas de todo tipo.